Los síntomas esclerosis múltiple sin duda alguna ocasionan un increíble deterioro en la calidad de vida de los pacientes. Normalmente, las lesiones surgen en cualquier parte del sistema nervioso central, ocasionando dolencias, como por ejemplo: pérdida de la visión, fuertes sensaciones de dolor, fatiga, disminución de la coordinación motora, entre otros.
Ahora bien, aunque se trata de una enfermedad neurodegenerativa, algunas personas pueden no presentar manifestaciones durante un tiempo, mientras que otras si las experimentan de forma sostenida. La buena noticia es que, sin importar la gravedad, hay alternativas para contrarrestar las dolencias y aportar bienestar a los afectados.
Por suerte, hay una gran variedad de tratamientos disponibles para tratar la esclerosis múltiple, no obstante, muchos especialistas hacen énfasis en que un solo método no aliviará el problema de la noche a la mañana, al contrario, se requiere un plan integral en donde se combine un buen estilo de vida, alimentación, fármacos y terapias.
Un tratamiento integral
En primer lugar, según un estudio estadístico, la mejor forma de empezar es modificando los hábitos, es decir, que los pacientes deberían aprender a comer alimentos seguros y discernir entre otros no tan recomendados. Asimismo, los médicos aseguran que llevar una dieta balanceada, rica en verduras, comidas con alto contenido de ácidos grasos (Omega 3) y frutos secos ayudará en gran medida a mejorar la enfermedad.
Además, hay diferentes planes de alimentación dirigidos a aliviar las dolencias y, afortunadamente, en el mundo de la medicina estos tipos de alimentos han tenido un gran éxito al revertir los procesos de la esclerosis múltiple.
Por otro lado, en cuanto a las técnicas terapéuticas destacan la terapia ocupacional, la fisioterapia y aquellas enfocadas en ofrecer un entrenamiento en las actividades de la vida rutinaria, como por ejemplo la asistencia de mascotas de compañía.
Finalmente, es fundamentar que el paciente tenga una actitud positiva, pues enfrentar una patología de esta magnitud no es fácil, por eso, deben evitar entrar en estados de estrés y de ansiedad, para eso, existen ejercicios de relajación que muy bien pueden complementar el tratamiento. De ser así, la suma de todo, ayudará a vivir de manera más “normal”.